El pasado día 27 de abril pudimos asistir a la presentación de Cervezas Ibérica, una nueva marca de cervezas artesanas que nace de la pasión de tres amigos que provienen de profesiones completamente diferentes. Desde una finca de Guadalajara, a orillas del Tajo, fabrican sus dos primeras recetas, Primitiva y Quadrivium, que pudimos degustar junto a un acertado maridaje.
Su inspiración es la naturaleza y la historia de los primeros pobladores de la península ibérica, como demuestran en su emblema, una fusión entre los cazadores y recolectores de los grupo neolíticos nómadas que poblaron la piel de toro.
Las Cervezas, Primitiva y Quadrivium
Como decíamos, actualmente, Cervezas Ibérica fabrica dos referencias. Primitiva, una Pale Ale clásica, y Quadrivium, una Dark Strong Ale, que se asemeja bastante a las Quadrupel belgas.
Dos referencias muy diferentes, pero con interesantes resultados. Os contamos nuestra experiencia.
Primitiva, Pale Ale muy fresca

Con Primitiva nos encontramos con una cerveza tipo Pale Ale muy fresca. No muy lupulada y con muchos recuerdos a aromas del pan, además de flores y frutas.
Visualmente, es una cerveza bastante más oscura de lo esperado, con un color entre dorado y ámbar, pero con mucha transparencia y limpieza.
En la fase olfativa encontramos muchos aromas a pan, cereales, bastante florar y frutal y poca presencia de lúpulo.
En boca aparecen esos sabores que percibíamos en nariz, siendo más intensos los sabores a cereal que los florales, aunque también están presentes. Finalmente, percibimos el lúpulo que acompaña al trago final de la cerveza. Su carbonatación media es bastante agradable y te invita a seguir bebiendo.
Una cerveza muy suave y agradable, que tuvo muy buena aceptación entre los que estuvimos presentes en la cata.
El maridaje



Para la cata de Primitiva disfrutamos de tres maridajes.
Una patata frita natural con anchoa y trozos de tomate fresco, regado con un chorrito de aceite de oliva. La cerveza resalta el sabor intenso de la anchoa y su sal. Potencia los sabores de manera intensa.
Un tostadita de pate de aceitunas negras y verdes, u olivada. Al igual que en el caso anterior, restalta el sabor sabroso de la aceituna.
Perdiz escabechada. Impresionante ya de por sí, la cerveza potencia aún más la salsa que acompaña a la carne, destacando los sabores dulces del vinagre de la receta. Delicioso.
Quadrivium, sabores belgas y bourbon

Con Quadrivium cambiamos completamente de tercio. Una cerveza mucho más compleja para otro momento del día.
Ingredientes y procesos de alta calidad, como caviar de vainilla extraído manualmente y macerado en bourbon, y el uso de roble tostado francés.
Una Dark Strong Ale que nos sorprendió profundamente.
Visualmente, una cerveza con colores cobrizos, bastante limpia y poco traslúcida.
En la fase olfativa, olores penetrantes, percibimos la vainilla y el bourbon que anticipan sabores dulces.
En boca, una cerveza compleja. Los sabores dulces de las maltas se mezclan con una amargor muy suave. Aparecen la vainilla y el bourbon y los recuerdos de madera que aporta el roble francés tostado. Notas de galletas dulces y caramelo.
Una cerveza compleja, de trago largo con una graduación de 9%, que seguramente envejezca muy bien en la botella.
Excelente para degustar tranquilamente acompañada de un postre dulce.
El maridaje

Para la cata de Quadrivium disfrutamos de tres maridajes.
Tartaleta de crema con canela. Los sabores de Quadrivium amplificaban el sabor de la canela.
Trufas de chocolate. El chocolate y el ligero amargor de de Quadrivium, además de los sabores maltosos elevaban la intensidad del cacao en la boca.
Queso azul. El queso azul resaltaba ampliamente sus sabores salados y lácticos. Espectacular combinación.
Un proyecto de cerveceros que arranca con mucha ilusión y muy buenas ideas. ¡Seguiremos de cerca sus próximas recetas!