El pasado 26 de junio asistimos a la presentación de Gonzalo Barbosa como primer Tapster español en la historia de la marca de cerveza Pilsner Urquell.
Pero, ¿qué es un Tapster? Pues ni más ni menos que una de las 230 personas elegidas dentro del programa internacional de Pilsner Urquell con la misión de extender a nivel mundial el cuidado a la hora de servir o tirar las cervezas de la marca checa.
Nuestro primer representante español en los 177 años de historia de la compañía, Gonzalo Barbosa, nos ofreció un interesante taller de tiraje de cerveza, en el que aprendimos cuatro de los estilos de tiraje de Pilsner Urquell e, incluso, pudimos probar a ejecutarlos nosotros mismos.

El Tapster - Guardian de la Taberna
La figura del Tapster es muy importante a la hora de poder disfrutar de la cerveza en su máxima calidad.
Su papel fundamental es formar al bartender (personal que nos atiende en el bar) en el proceso de tiraje de la cerveza, explicar qué tipo de cerveza nos van a servir y comprobar las instalaciones para mantener así todas las propiedades de la misma en el momento que vayamos a degustarla.
Con el Tapster se completa la cadena, desde el momento en que se inicia la producción hasta que llega la cerveza a nuestra jarra.
Pero llegar a ser Tapster no es una tarea sencilla. La formación requerida para ello es dura y muy exhaustiva. Formación en fábrica, conocimiento completo del producto, saber si una cerveza tiene algún problema e identificar el porqué, conocer profundamente el sistema para servir la cerveza y su higiene y, por supuesto, dominar sus tirajes y qué obtenemos en cada uno de ellos.
Actualmente, como decíamos, solo 230 personas en todo el mundo son Tapsters de Pilsner Urquell.
Los Tirajes - Descubriendo nuevos matices de Pilsner Urquell
Existen diferentes tipos de tirajes y cada uno de ellos nos va a ofrecer diferentes sabores y texturas en nuestra jarra de cerveza. Es importante conocerlos y saber explicar qué vamos a encontrar en cada uno de ellos.
Estos son los 4 tirajes de Pilsner Urquell.
NA DVAKRÁT
Este es el método más común y el que solemos encontrarnos habitualmente cuando nos sirven cualquier tipo de cerveza. La copa limpia, húmeda y fresca se inclina 45º para servir el cuerpo líquido de la cerveza. Una vez servido el líquido se hace lo propio con la crema o espuma en la parte superior de la cerveza.
El resultado es una cerveza que mantiene por más tiempo la espuma y donde el amargor gana protagonismo. Es el más habitual en maridajes con comida.
HLADINKA
Un tiraje que nos traerá muchos recuerdos a los que hemos visitado la República Checa. Este tiraje se hace al contrario de lo que estamos acostumbrado y nos chocará bastante la primera vez que lo veamos.
En una jarra húmeda y fresca, con una inclinación de 45º servimos primero la crema de la cerveza. Después introducimos el grifo hasta el final del vaso para servir la parte líquida.
El resultado es una cerveza más carbonatada, donde el dulzor gana terreno al amargor de la cerveza. Ideal para tomarte unas cuantas jarras sin darte cuenta y sin acabar con sensación de hinchazón.
MLÍKO
Tiraje muy sorprendente, que hará que alguno se eche las manos a la cabeza la primera vez que lo ve.
En este caso, solo servimos espuma… Sí, SOLO ESPUMA.
Con este tiraje obtenemos un sabor completamente diferente al de los dos anteriores, donde el dulzor gana por completo el terreno. Parecerá que estás tomando otra cerveza.
Su textura es muy aterciopelada. Realmente curiosa. Hay que beberla del tirón para apreciar todos sus matices.
CUT BEER
En este tiraje mezclamos dos cervezas: la parte líquida de una y la parte cremosa de otra.
No es un tiraje muy tradicional.
En este caso, se mezcla Pilsner Urquell en la parte líquida y Kozel Dark (lager tostada) en la parte de crema o espuma.
El resultado es una jarra de cerveza donde se distinguen ambas cervezas, pues por densidad no llegan a unirse una vez servida.
El amargor de Pilsner Urquell y el dulzor de la Kozel Dark combinan perfectamente y nos permite jugar con las cantidades para obtener un resultado más dulce o amargo.
Muy recomendable probarlo.
Pilsner Urquell - La cerveza checa desde 1842
Pilsner Urquell nace de la unión de los ciudadanos de la ciudad checa de Pilsen para crear una fábrica de cerveza común donde elaborar un único estilo de cerveza.
En 1842 se crea la primera cerveza rubia, dorada y transparente de la historia. Nació así la primera Pilsner Urquell, que casi no ha variado su receta hasta nuestros días.
A partir de ese momento, el estilo se hace muy popular a nivel mundial, convirtiéndose en el estilo de cerveza más fabricado del mundo. El estilo Pilsner.
En 1890, los ciudadanos de Pilsen deciden patentar su cerveza como Pilsner Urquell o, lo que es lo mismo, la cerveza Pilsner original («urquell», en alemán, se traduce como «fuente original»).
Toda su producción se realiza en la ciudad de Pilsen. No se fabrica en ningún otro lugar y los ingredientes son de lugares cercanos a la ciudad. Agua de los acuíferos de Pilsen, cebada de Moravia y lúpulo Saaz.
Además, Pilsner Urquell es de las pocas fábricas del mundo que maltean su propio grano para dar homogeneidad a su producto.
El cuidado de su producto es una de sus señas de identidad. Con la distribución, la higiene de sus productos y, por último, con el tapster, buscan ofrecernos un producto con la misma calidad desde la fábrica hasta nuestra jarra.
